Hace poco les dedicábamos una de nuestras secciones fijas en 1051 Magazine, Soundtrack Of Our Lives, con motivo del treinta aniversario de su primer álbum. Se merecen esto y mucho más, ya que son auténticas leyendas de la música electrónica, un par de tipos que están por méritos propios en ese lugar.
Antes de la pandemia tenían preparado su propio treinta aniversario en el negocio, pero el maldito Covid detuvo todo. Por eso ahora el proyecto se llama Thirty Something, porque cuando se cierre con la edición de ese álbum de remezclas, rarezas, caras B e inéditos, probablemente sea primavera del año 2022 y ya sean 32 años los que tengan que celebrar. Y también se comenta que para otoño habrá álbum con material nuevo.
Sea como fuere, el primer adelanto es tan emocionante que nos hace esperar grandes cosas de ese álbum aniversario. Siempre he dicho que, si alguien no ha experimentado la sensación que produce contemplar tu puesta de sol favorita oyendo esta canción, que no tarde en hacerlo. Personalmente pienso que es una de las más hermosas y emotivas canciones de la historia de la música, ya no sólo de la música electrónica.
En ese artículo que dedicamos al aniversario del mítico Green Album de Orbital, contamos la historia de como se gestó esta tremenda canción, contado por el propio Paul Hartnoll:
“Meses después del éxito de Chime, en marzo del 90, recibí una llamada de David Holmes, DJ, club mánager y en aquellos días también y peluquero de Belfast. ¿Querría Orbital tocar en la universidad de Bellas Artes de Belfast? Sí. Así que después del concierto, en la habitación libre de la casa de David, y me preguntó si teníamos alguna maqueta. Le di una cinta con los dos temas. Dos semanas más tarde, David llamó y me dijo que a él y a sus amigos les encantaba el segundo tema de la cinta. La llamamos Belfast por el buen rato que pasamos allí. Así que el tema lleva el título en honor de David y de todos sus amigos y está dedicada a ellos.”
Ahora volveremos a David Holmes en breve.
Hace poco tiempo, pude escuchar a uno de los remezcladores más solicitados de las últimas décadas decir una tremenda verdad. Lo más fácil es remezclar un tema “flojo”, lo tremendamente difícil es remezclar una gran canción…. Y con Belfast ha ocurrido eso a lo largo de sus treinta años de vida. Pocos han sido los intentos oficiales, Sasha y The Light lo hicieron en el año 1999, alejándose mucho del original. Pero hace relativamente poco, en los primeros días de julio, en un programa de radio de la BBC saltó la sorpresa con un pedazo de remezcla de Holmes, casi diez minutos de profundo respeto al original y de la maestría del productor, compositor y DJ irlandés. Se cerraba el círculo con una versión maestra. Por cierto, versión que de momento permanece inédita oficialmente.
Ayer los Hartnoll nos anunciaban ese primer adelanto de Thirty Something, con dos remezclas de Belfast a cargo de Anna Miranda, más conocida simplemente como ANNA, excepcional DJ y ya con una década a la espalda como remezcladora. Hace unos días presentábamos su remezcla de Bodzin y Romboy junto a uno de sus socios favoritos en estos quehaceres, Wehbba. En esta ocasión, Anna ha seguido el camino marcado por Holmes, revisitando Belfast en su versión Techno con absoluto respeto por el original, añadiendo pólvora rítmica sin exceder en la medida y conservando buena parte de la melodía original, con un resultado óptimo.
Y esa puesta de sol a la que antes hacíamos referencia se alarga, la Ambient mix que nos deja la Dj de Sao Paulo es un perfecto acompañamiento a la versión original. Seda en modo ambiental, emoción en estado puro.