Habiendo escuchado algún que otro EP y su primer y aclamado álbum Family Portrait (2018), el que escribe estas líneas se plantó en aquella edición del fabuloso Paraiso Festival del año 2019 (que, esperamos que resurja de sus cenizas post-Covid y nos traiga una tercera edición) con ganas de ver que iba a ofrecer en directo Ross From Friends.

Y fue una de las más agradables sorpresas del festival, porque, como es habitual en todo lo que hace Felix Clary Weatherall (nombre que figura en su pasaporte), fue algo diferente, fresco y tremendamente divertido. Acompañándose de Jed Hampson y John Dunk, Felix arma un trío para los directos que lleva guitarra, saxofón y teclados + Ableton Live. Tremendo.

Si antes de ello ya seguía sus andanzas con interés, desde aquella noche de viernes procuro no perderme nada de lo que hacer, porque siempre es interesante.

Unos datos biográficos para quien no conozca a este brillante productor británico. Nace en junio del año 1993 en la ciudad costera de Brightlingsea, cerca de Colchester, en el condado de Essex, en el seno de una familia muy musical, ya que su padre, Jamie Clary, era ingeniero de sonido de equipos de directo. En el video clip de Pale Blue Dot, tema de su primer álbum, se pueden ver filmaciones realizadas por su madre, Jo Weatherall, en una gira que hicieron en un autobús por toda Europa, montando raves por donde se lo permitían.

Con ese background familiar, no es de extrañar que el jóven Felix decida dedicarse a la música y en el año 2012 nace Ross From Friends (la anécdota del nombre es curiosa: en el estudio donde grababa unos temas, había una televisión con dvd integrado en la que se había quedado atascado un dvd de la comedia estadounidense y era lo único que se veía cada vez que la enchufaban).

Hagamos un fast forward, y entremos en este año 2021, cuando en enero Felix estrena su nuevo sello discográfico (Scarlet Tiger) con el tema Burner, rompiendo un silencio discográfico provocado por la pandemia fundamentalmente. Pero la maquinaria de Ross From Friends seguía en marcha de manera silenciosa pero intensa, aunque no llegaran lanzamientos discográficos durante ese período.

Durante ese tiempo, su vida transcurrió fundamentalmente entre su estudio y su casa, situados no muy lejos uno del otro, con Old Kent Road como eje de esos desplazamientos, en el sur de Londres. Un barrio que tiene raíces familiares para Felix, ya que en el trabajó su abuela y su padre estuvo en varias casas ocupadas y en unas cuantas fiestas, lo cual sirvió de inspiración para el proceso creativo de Treads, el nuevo álbum de Ross From Friends.

 

 

Eso en cuanto a lo que inspiración refiere, porque en el plano técnico, Treads también trae consigo un proceso de investigación por parte de Felix. Frustrado por parte de lo que supone para el proceso creativo la grabación de hardware e instrumentos a través de un ordenador -la necesidad constante de empezar y parar la grabación, guardando y catalogando todo sobre la marcha-, Félix decidió escribir y construir su propio software. El plugin resultante, llamado Thresho y está disponible a través de la plataforma Max For Live de Ableton. Su funcionamiento es lógico y sencillo, el plugin hace que la grabación comience cuando el audio alcanza un umbral definido por el usuario y se detiene cuando baja de ese umbral, guardando e indexando automáticamente los clips resultantes junto con las marcas de tiempo.

Con Thresho funcionando en segundo plano, Felix descubrió la posibilidad de poder permanecer plenamente en el momento mientras improvisaba con sus instrumentos, libre de seguir las ideas a medida que surgían, con la seguridad de que no se perdería nada, ni sería necesario volver a reproducirlo o capturarlo. De esa manera, pasó los primeros seis meses experimentando con su hardware, sin comprometerse con ninguna música, pero dejando que Thresho grabara en segundo plano todo lo que inba haciendo, con cada sesión dejando su grabación en un archivo que crecía día a día. Cuando llegó el momento de producir el álbum, pudo basarse en momentos específicos, ya sea recordando la fecha o la hora exacta en la que había realizado una grabación, o simplemente navegando por la ahora vasta biblioteca de audio de su propia creación.  Como el propio Felix cuenta, «A veces, una melodía completa podía surgir de una idea dentro de una grabación o, a veces, simplemente volcaba una grabación al azar en un proyecto existente y veía qué pasaba»

De esa manera nace Treads. De la inspiración de un barrio con aromas familiares, de la investigación sobre cómo mejorar el proceso de grabación y el tiempo sin posibilidad de hacer mucho más que nos ha dejado el Covid como legado a la humanidad.

 

 

Con todo ello, el segundo álbum de Ross From Friends es otro de esos pequeños grandes acontecimientos en la línea de tiempo en la historia de la música electrónica. Se abre con los ritmos truncados de The Daisy, a los que sigue la ascendente melodía de Love Divide y la melancolía bailable de Revellers. A Brand New Start es casi un interludio, que deja paso a XXX Olympiad, con aromas rítmicos de los primeros días de Aphex Twin y cálidos patrones melódicos, para llegar a Grub, donde la base rítmica alcanza otras latitudes. Con Spatter/Splatter, Morning Sun On A Dusty Room y Run desembarcan los cortes más experimentales del disco, que dejan paso a Life In A Mind, que no deja dudas de cuál es su objetivo, que no es otro que las pistas de baile.

Para cerrar el disco tenemos un merecido homenaje a uno de los principales culpables de la creación de Treads. Tresho 1.0 refleja a la perfección lo explicado con anterioridad con respecto a ese plugin, y Tresho 1.1 es un corto cierre de apenas medio minuto.

Un disco para oírlo y disfrutarlo con profundidad, otro excelente ejercicio de este productor británico que siempre deja su sello personal en cada artefacto sonoro que sale de sus manos.

El álbum ha sido editado por Brainfeeder Records, y está ya disponible aquí

 

---