Glaskin son Ferdinand y Jonathan Bockelmann, dos hermanos de Múnich, Alemania. Jonathan y Ferdinand cuando tenían 12 y 13 años, actúan por primera vez en público con su banda de Metal llamada Obsessed. Algo que no era raro, teniendo en cuenta que, en su casa, se respira música desde siempre porque su madre es pianista. Jonathan primero tocó el violín, luego la guitarra eléctrica, Ferdinand la batería, y más tarde, tomaron caminos diferentes. Jonas se convirtió en guitarrista clásico, Ferdinand se dedicó a los platos, y la razón que les lleva al fin a pinchar juntos es seguir compartiendo espacio vital en casa de sus padres, aunque en más de una vez han declarado que «siempre tuvimos claro que queríamos hacer música juntos».
En 2016, grabaron su primer EP y se convirtieron en Glaskin.
También por aquellos días se convierten en residentes del Kong Club en su ciudad natal, y al año siguiente, al cierre del mismo, pasan a habitar la cabina del legendario Blitz, donde siguen dejando muestra de su maestría.
En el año 2019, los hermanos lanzaron su propio sello, YAEL Trip, un sello destinado a editar su propio material, así como las interpretaciones de figuras afines: los primeros dos EP del sello han contado con remezclas de Ryan James Ford y Marcel Fengler.
También forman parte del equipo de promoción de los dos festivales muniqueses Back to the Woods y Schall im Schilf, donde actúan regularmente. Cada festival atrae a unos 10.000 asistentes. Con un sonido en constante evolución y una agitada agenda de lanzamientos, Glaskin continuará su desarrollo como uno de los nuevos actos más llamativos de la escena techno alemana y, por supuesto, de la escena underground muniquesa.
Tras una serie de interesantes lanzamientos en forma de EP´s en el sello Hotflush Recordings y más tarde en YAEL Trip, ha llegado el momento de hacer llegar al público su primer artefacto sonoro de larga duración.
Con Klaftertief, Ferdinand y Jonathan exploran un amplio horizonte sonoro que va mucho más allá del expuesto en trabajos anteriores. El título hace referencia a una antigua palabra alemana que designa un agujero profundo en la tierra que se cree que es infinito, lo cual es perfectamente adecuado para este álbum de debut.
Etiquetar este trabajo sería tarea casi imposible… techno de vanguardia, techno inteligente, IDM, con gotas de electro y jungle… se podría decir que es un retrato del trayecto musical por el que han transitado durante los últimos años, un alambique de influencias e ideas, que ha destilado un trabajo absolutamente libre de ataduras artísticas y convencionalismos.
Se puede empezar por la tranquila belleza del tema que da título al álbum, Klaftertief o la serenidad sonora de Hydrogroove II para transitar por un paisaje Jungle en el tema que cierra el disco, Forms. Pero si queremos entrar en trance sonoro en medio de una pista de baile en cualquier club o festival, allí nos traslada perfectamente Galan o uno de los temas que salieron como adelanto del disco, el rotundo Stalactite Cave (que recibió su merecida remezcla de Matrixxman en ese EP de adelanto).
“Un día improvisábamos con un sintetizador en busca de una línea interesante y pegadiza, y al día siguiente estábamos cortando samplers grabados hasta que empezaban a hacernos bailar en el estudio. La mayor parte del período de grabación la pasamos frente a nuestro sistema modular. Nos dio mucha inspiración, un cierto tipo de aleatoriedad que buscábamos y una creación musical alegre y sin esfuerzo en general».
“Siempre soñamos con componer nuestro primer LP completo. Nos surgió de forma natural con el estado en el que estábamos en el que nos encontramos a principios del año pasado. El proceso estuvo lleno de alegría, ya que no nos pusimos ningún tipo de límite. En cuanto a la producción, el género o el tiempo. Era la pura alegría de hacer música con una con una configuración musical diferente cada día».
Klaftertief se publicará el 12 de noviembre, ya se puede hacer la reserva aquí