Max Cooper Cooper es uno de esos personajes que nos fascina en 1051 Magazine por múltiples razones. En muchas ocasiones, esto es debido a su música, pero de la misma manera de vez en cuando nos encandila uno de sus post de Instagram (altamente recomendable, @maxcoopermax), o un set suyo o un nuevo de sus únicos shows en vivo, como el que hizo este pasado mes de octubre en la Acrópolis de Atenas, siendo el primer artista de música electrónica en hacerlo.

 

 

Max Cooper es uno de los artistas más interesantes de las últimas décadas. De esto no cabe la menor duda.

Su carrera así lo demuestra. Max nació en Belfast en el año 1980 de padres australianos, y creció allí hasta que marcha hacia Nottingham donde cursa estudios de Biología Computacional, recibiendo su título en el año 2008. Hasta el año 2010 estuvo trabajando como investigador genético en el University College London. Pero desde entonces, su carrera se ha centrado en el sonido y la imagen.

Cuenta el propio Max que no tuvo una formación musical como tal, aunque a partir de los doce años, estuvo tocando el violín un par de años, pero reconoce que no le entusiasmó en absoluto aquella experiencia.

En el año 2007 editó su primer EP, Tamperine, y tan solo un par de años más tarde ya estaba grabando para Traum Schallplatten. Desde ahí, su carrera no ha hecho más que progresar en proporción geométrica, y ha editado más de cuarenta singles y EP´s, y su primer álbum, Human, llegó en el año 2014. El siguiente, el tremendo y reconocido Emergence, ya se editó en su propio sello Mesh, y si hablamos de su faceta como remezclador, supera ampliamente el centenar de releases, y la lista de artistas que han requerido su trabajo en ese aspecto es larga, variada y repleta de nombres famosos.

 

 

Lo que nos trae hoy es el primer avance de lo que será su nuevo álbum, Words Unspoken , que se pondrá a la venta el 22 de marzo en vinilo, CD, Blue-Ray & digital. El primer avance es Everything, que se acompaña de su correspondiente videoclip, que Max Cooper ha realizado junto a Nick Cobby y el fotógrafo Andrey Prokhorov. Es el primero de los trece trabajos visuales que estarán en ese Blue-Ray que acompañará la edición en otros formatos.

Oigamos lo que Cooper dice sobre su nuevo trabajo de larga duración:

«Me encanta sentir que todo es posible. Siento que estoy reventando y necesito encontrar alguna expresión», dice Cooper.

«Los sintetizadores parecían llevar la esperanza de todo lo que podía imaginar, condensado en una simple progresión de acordes, los pads improvisados y las capas de distorsión. Fue muy divertido trabajar con ellos, y pasar tiempo en esa mentalidad creativa generó un montón de ideas que pudieron ser derribadas más tarde en condiciones menos maniáticas».

«Siempre he tenido problemas con las palabras: intentar comunicar algo significativo sobre mi estado interno, de una manera que parezca hacerle justicia, siempre me ha superado. Pero la música no tiene nada que ver con el lenguaje. Es mi medio de expresión, y por eso hago mucha, me siento obligado a crear».

 

 

Words Unspoken es otro enorme artefacto sonoro salido de la mente y las manos del genio de Belfast (afincado en Londres desde aquel año 2008). Encontramos los habituales paisajes abstractos que Cooper tan bien sabe dibujar, en los que se perciben esas influencias que en tantas veces ha citado (Olafur Arnalds, Max Richter, Philip Glass…). Pero también hallamos esos trallazos que también han definido parte de su carrera como son Exotic Contents, Broken Machines Broken Dreams o Solace In Structure, que de nuevo elevan a su autor como uno de los pilares actuales del Intelligent Techno o del IDM.

 

Fecha de lanzamiento, 22 de marzo en Mesh. Reserva ya disponible en todos los formatos aquí

 

---